El cáncer de tiroides, como muchas otras enfermedades, es un tipo de cáncer al que van asociados una serie de síntomas, que no necesariamente tienen porque deberse siempre a la presencia de un tumor, pero que cuándo este existe, suelen aparecer.
- Un bulto o masa en el cuello, que crece a menos o más rapidez, dependiendo del tumor, la persona...
- Inflamación en el cuello, ya que es ahí donde se localiza la glándula tiroides y por tanto donde se sentirá la inflamación en el caso de tener cáncer de este tipo.
- Dolor en la parte central del cuello que puede llegar a los oídos.
- Tos constante sin presentar resfriado, gripe u otra enfermedad de forma aparente.
- Problemas a la hora de deglutir.
- Dificultades respiratorias.
- Ronquera e incluso afonía persistente en la voz.
De todos estos síntomas, el más frecuente es la aparición de un nódulo palpable en el cuello. Si esto aparece, deberíamos acudir a nuestro médico, aunque la mayoría de estos nódulos suelen ser benignos.
Debemos destacar, que este tipo de cáncer no produce una sobreproducción o disfunción de la glándula tiroidea, por lo que los niveles de tiroides se mantienen normales, de ahí a que tampoco aparezca la pérdida o aumento de peso como ocurre a veces en problemas de la tiroides.
Para finalizar esta entrada, les dejamos un vídeo de una conferencia dada por una doctora en Madrid, acerca de los síntomas de esta enfermedad.
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